La comida puede ser un momento agradable o una pesadilla. Pensar en qué preparar para comer ya es el primer reto al que nos enfrentamos y que nos genera estrés.
Tener en cuenta qué nutrientes lleva cada alimento, escoger un menú saludable y sacar tiempo para prepararlo, contar con los gustos de todos los miembros de la familia, intentar no repetir con demasiada frecuencia… son algunas de nuestras preocupaciones a la hora de elegir plato y a tener en cuenta cuando estamos organizando la comida de cada día de la semana.
Luego está el momento de sentarse a la mesa. Si nuestro bebé se está familiarizando con la alimentación autónoma, es posible que algunos días tengamos que limpiar la cocina entera y bañar al comensal. Otra tarea añadida.
Con este panorama, agobiarse es inevitable por ello, queremos darte unos consejos que puedes llevar a cabo con tus peques para que la hora de la comida sea más fácil de llevar y, por supuesto, sea satisfactoria tanto para tu criatura como para ti.
Cantidades
Internet está lleno de fórmulas para calcular la cantidad de calorías, gramos de nutrientes, piezas de tipos de alimentos, etc. que debemos comer según nuestra edad, peso o sexo. Sin embargo, cada persona y cada peque es diferente y la comida debe adaptarse a las necesidades individuales de cada uno. Si tienes dudas sobre cuánto y qué debería comer tu criatura, puedes consultar a un experto y te orientará según su edad y necesidades particulares pero:
- Nunca le obligues a terminar el plato si no quiere y mucho menos le castigues si no lo hace. La hora de la comida debe de ser agradable para generar una buena relación con la comida. Los seres humanos tenemos la capacidad de detectar cuándo estamos llenos. Tu criatura sabe perfectamente cuándo su hambre se ha saciado.
- Una forma de hacer que perciba que hay menos comida es servirla en un plato más grande. Un plato pequeño con la comida desbordándose puede agobiar a nuestro hijo o hija por la sensación de exceso. Es mejor utilizar un plato amplio donde además sea más fácil manejarse con los cubiertos para coger la comida.
Ritual
La hora de la comida, la cena, etc. puede ser un momento de reunión familiar, donde también hay espacio para divertirse y, sobre todo, para compartir con los seres queridos. Para ello:
- Motívale a participar en todo el proceso: desde elegir la comida y hacer la compra hasta poner la mesa, que se sirva su comida y utilizar cubiertos (seguros y bajo supervisión). No solo estarás enseñándole responsabilidad, también otras habilidades como la organización de un calendario, la prudencia a la hora de mover o coger ciertos utensilios de cocina, la paciencia cuando sirva la comida, etc.
- Acompáñale, para que aprenda sobre hábitos a través de observarte a ti u otros miembros de la familia. Si tú comes bien, tu criatura también lo hará a través de imitar lo que ve en sus modelos de conducta.
Menú
Al igual que con las cantidades, solo tú sabes cuál es la dieta más adecuada para tu hijo o hija y en caso de tener dudas, debes consultar a un experto pero, para su estimulación y aprendizaje puedes probar varias cosas:
- Permítele elegir. Puedes proponer dos opciones, hacerle partícipe de la decisión del menú semanal o en el mismo supermercado ir comentando qué metéis en el carrito y qué podéis cocinar más tarde con ello. Esto también puede convertirse en una actividad en familia que además de fomentar la autonomía del pequeño, te puede hacer a ti más amena la tarea.
En los grupos de Muymamás compartimos trucos como estos que funcionan con nuestras criaturas y que quizás a ti también te sirvan. ¿Te apuntas?
Y no te olvides…
Si tienes dudas consulta SIEMPRE con un experto.